AUTOAGRESIONES EN LA ADOLESCENCIA

La autoagresión es un fenómeno cada vez más frecuente entre jóvenes y adolescentes. Comporta varias modalidades, como cortarse, quemarse con un cigarrillo, impedir la cicatrización de heridas o golpearse. El más común es el “cutting”, práctica extendida entre los jóvenes que llegan a colgar videos en youtube sobre este tipo de autolesión.

Esta práctica, también conocida como Síndrome de Automutilación (SAM) o automutilaciones impulsivas, se produce en los momentos en que se incrementa el nivel de angustia de la persona. Puede llegar a cronificarse, en forma de práctica secreta y raramente tiene como objeto el suicidio.



la automutilacion o autoagresion es una practica extendida entre los jovenes

PSICOPATOLOGÍA Y COMORBILIDAD CON OTROS TRASTORNOS PSIQUIÁTRICOS


Este trastorno suele aparecer junto a una patología severa, observándose la existencia de un trastorno límite de la personalidad en un 70-80% de los casos.

La autolesión suele estar relacionada con experiencias traumáticas en la infancia o crisis de identidad en la adolescencia, y aparecen en un contexto de alta impulsividad, un alto grado de ansiedad y manifestaciones frecuentes de ira. Estos pacientes suelen tener baja tolerancia a la frustración, dificultades en el control de impulsos y en muchas ocasiones malas relaciones familiares, así como baja autoestima. 

Presentan pocas habilidades sociales, y en el marco de su pobre autoconcepto, requieren constantemente de la aprobación y muestras de afecto de su entorno, evidenciando una falta de madurez emocional. Igualmente sus pocas destrezas en este ámbito tienen como consecuencia la dificultad para identificar sus propios estados emocionales así como para canalizar la expresión de dichas emociones, especialmente el sentimiento de rabia y de frustración, al que dan salida por medio de las autoagresiones. 

CUTTING

Es el acto de cortarse las muñecas con objetos afilados hasta producirse heridas superficiales. Al principio son cortes muy pequeños, pero paulatinamente se van realizando con mayor frecuencia ante cualquier situación estresante. Respecto a la percepción del dolor “las cortadoras” no tienen sensación de placer ni de dolor, pero describen el acto como una forma de cortar con el dolor psíquico. 

TRATAMIENTO

Dado que la falta de eficacia en la identificación y manejo de las emociones es uno de los puntos clave en el desarrollo de este trastorno, es necesario enseñar a estos jóvenes cómo discriminar entre sus estados emocionales dando una vía de escape adecuada a cada uno de ellos.
 
Otro punto importante del desarrollo de la terapia será el control de la agresividad y manejo de las reacciones de hostilidad y displacer.
Es fundamental reforzar el autoconcepto y enseñarles a aceptar su propia identidad. Igualmente en ocasiones habrá que intervenir sobre el núcleo familiar si es una fuente de conflicto y de ansiedad para el joven.